Consejos para Trotar en el Atletismo
El trote en el atletismo se refiere a una forma de carrera lenta, conocida como "jogging" en Estados Unidos en los años 60 y 70. Anteriormente practicado por atletas y boxeadores como parte de su entrenamiento diario, el trote es una modalidad de ejercicio que busca mejorar la salud y la condición física.
Es importante tener en cuenta que el trote es una actividad física repetitiva y programada, no orientada a la competencia. Aunque es una excelente manera de mantenerse en forma, es fundamental seguir recomendaciones para evitar lesiones.
Impacto del Trote en el Cuerpo
- A nivel de las rodillas: el impacto es de 5-9 veces el peso del cuerpo en cada paso, lo que puede provocar lesiones en rodillas, caderas, columna y pies.
- A nivel de los pies: el impacto es de 2-5 veces el peso del cuerpo en cada pisada, afectando la anatomía del pie.
- En otras articulaciones: como cadera y columna, también se pueden presentar afecciones, aunque en menor medida.
Recomendaciones para Trotar de Forma Segura
- Realizar calentamiento antes de correr.
- Preferir terrenos blandos como grava o tierra en lugar de asfalto.
- Mantener una postura correcta al trotar, con la mirada al frente y hombros relajados.
- Utilizar zapatillas con amortiguación adecuada para el tipo de pisada.
- Cambiar las zapatillas cada 550 km de uso.
- Evitar excederse en la intensidad y duración del trote.
- Escuchar al cuerpo y detenerse si se siente dolor.
- Explorar otras opciones de ejercicio de bajo impacto en caso de lesiones articulares.
Conclusión
El trote puede ser una excelente forma de ejercicio, siempre y cuando se realice de manera adecuada y se tomen las precauciones necesarias para prevenir lesiones. Recuerda que escuchar a tu cuerpo es fundamental para mantener una rutina de trote segura y efectiva en el atletismo.
